October 29, 2025
Antes de profundizar en la selección de aceite para altas temperaturas, es esencial revisar los conceptos básicos del aceite de motor. El aceite de motor, o aceite para motores, es un fluido vital diseñado para reducir la fricción entre las piezas móviles, enfriar el motor, limpiar los depósitos y prevenir la corrosión. Consiste en aceites base y aditivos: los primeros determinan las propiedades primarias del aceite, mientras que los segundos mejoran características específicas.
La viscosidad, medida por el sistema de clasificación SAE (Society of Automotive Engineers), indica las características de flujo de un aceite. Las clasificaciones incluyen grado único (por ejemplo, SAE 30) y multigrado (por ejemplo, SAE 5W-30). Los aceites multigrado se adaptan a diferentes temperaturas: el prefijo "W" (Invierno) denota el rendimiento en climas fríos, con números más bajos que indican un mejor flujo en condiciones de congelación. El segundo número refleja la viscosidad a alta temperatura, donde los valores más altos aseguran la estabilidad en el calor.
El API (American Petroleum Institute) clasifica la calidad del aceite, con aceites para gasolina etiquetados como "S" (por ejemplo, API SP) y aceites para diésel como "C" (por ejemplo, API CK-4). Las letras más altas denotan un rendimiento superior. De manera similar, los estándares ACEA (Asociación Europea de Fabricantes de Automóviles) categorizan los aceites para motores de gasolina/diésel (A/B), motores con control de emisiones (C) y diésel de servicio pesado (E).
En calor extremo, priorice estos factores:
El calor diluye el aceite, reduciendo su efectividad lubricante. Opte por aceites de mayor viscosidad como SAE 10W-40 o 15W-50 para mantener la resistencia de la película de aceite. Consulte siempre el manual de su vehículo para conocer las especificaciones.
Los sintéticos completos superan a los demás en estabilidad térmica y resistencia a la oxidación, lo que los hace ideales para la exposición prolongada al calor. Los semi-sintéticos son una alternativa económica, pero requieren intervalos de cambio más cortos.
Elija aceites que cumplan con los estándares API SP (gasolina) o ACEA A3/B4 para garantizar una limpieza adecuada, protección contra el desgaste y resistencia a la oxidación.
La viscosidad a alta temperatura y alto cizallamiento (HTHS) indica la lubricación bajo estrés. Los valores HTHS más altos (≥3.5 cP) son críticos para los motores que operan bajo cargas pesadas o calor extremo.
Las marcas de renombre se someten a pruebas rigurosas para cumplir con los estándares de la industria, lo que garantiza una calidad constante y la protección del motor.
Los semi-sintéticos o totalmente sintéticos SAE 5W-30 o 10W-40 son suficientes. Para la conducción frecuente a altas temperaturas, inclínese hacia 10W-40.
Estos funcionan más calientes; prefieren los sintéticos completos SAE 5W-40 o 10W-40 con clasificaciones HTHS robustas.
Opte por sintéticos completos premium como SAE 10W-50, priorizando la protección térmica y la estabilidad al cizallamiento.
Los aceites de mayor viscosidad (por ejemplo, 15W-50) compensan los componentes desgastados, reduciendo el consumo de aceite.
Seleccionar el aceite adecuado para condiciones de alta temperatura es una piedra angular de la preservación del motor. Al alinear la viscosidad, el tipo de aceite base y los estándares de certificación con las necesidades de su vehículo, protege el rendimiento y la durabilidad. El mantenimiento regular, junto con hábitos de conducción conscientes, asegura aún más que su motor prospere incluso en los climas más exigentes. Armados con este conocimiento, los conductores pueden tomar decisiones informadas para proteger los sistemas vitales de su vehículo durante todo el año.